Para el 63% de los líderes en el resto de los países de Latinoamérica, sus Estados cuentan con “la infraestructura necesaria para garantizar la seguridad” de los ciudadanos. En cambio, en nuestro país este número de percepciones cae al 38%.
class="inline ad-wrapper" style="box-sizing: border-box; align-items: center; display: flex; justify-content: center; text-align: center; width: 856px; color: #3b3b3b; font-family: Roboto, sans-serif; font-size: 22px;">“Mientras que el 70% de los referentes latinoamericanos considera que la comunidad puede ser un blanco de ataques, este porcentaje aumenta al 92% en Argentina”, explicó al respecto el analista Alejandro Catterberg, presidente de Poliarquía Consultores y corresponsable de la investigación del Congreso Judío.
En el plano más general de la seguridad, el 80% de todos los encuestados cree que su comunidad puede ser blanco de algún tipo de ataque. Y el 60% afirmó que el Estado podría fortalecer su rol para protegerlos.
class="inline_2_DSK ad-wrapper ad-desktop" style="box-sizing: border-box; align-items: center; display: flex; justify-content: center; text-align: center; width: 856px; color: #3b3b3b; font-family: Roboto, sans-serif; font-size: 22px;">Para los consultados en el resto de América Latina, la discriminación ahora es “el principal problema que enfrenta la comunidad judía en la región, desplazando a desafíos históricos como la asimilación y las divisiones internas”, según se destacó en el informe.
El 91% de los líderes contestó que, desde aquel fatídico 7 de octubre, el antisemitismo creció en sus respectivos países. Además, el 66% sostuvo que considera peligroso usar la kipá en la calle.
Mientras tanto, para 7 de cada 10 el principal espacio donde se expresa el odio hacia los judíos son las redes sociales, a la vez que el 76 % señaló que las comunidades no deberían trabajar solamente para erradicar el antisemitismo, sino cualquier forma de discriminación.
La solución al conflicto Israel - Palestina
En la encuesta, los referentes comunitarios respondieron si estaban de acuerdo o no con la siguiente afirmación: “Sí, creo que para alcanzar la paz entre Israel y Palestina la mejor solución es la creación de dos Estados”. Entre 2018 y 2022 el porcentaje positivo siempre se había mantenido entre 80 y 82%. En 2024, en cambio, cayó al 69%.
Otro signo de la preocupación que genera la coyuntura israelí: este año el 92% dijo informarse diariamente sobre lo que pasa en ese país, cuando en los años anteriores la cifra fluctuaba alrededor del 70%.
Por último, el informe concluyó: “El 58% considera que su gobierno mostró apoyo a Israel a partir del 7 de octubre. Por otro lado, el 23% percibe que su gobierno expresó apoyo a Hamás, lo cual consideran que puso en riesgo la seguridad de la comunidad”.
Tras la publicación de este trabajo, el director ejecutivo del Congreso Judío Latinoamericano, Claudio Epelman, declaró: “Conocer las percepciones de quienes lideran las comunidades nos garantiza una base sólida para fortalecer nuestras acciones y tomar decisiones”. Desde la entidad remarcaron también que no puede dejar de verse al 7 de octubre de 2023 como “una fecha que marcó un antes y un después en la seguridad de Israel y las comunidades judías”.
Además, los datos se conocen casi en paralelo a que el grupo terrorista Hezbollah haya roto el acuerdo de cese de fuego en el Líbano. Lanzaron misiles en la zona del Monte Dov, en el norte israelí. Como respuesta, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunció operaciones en el territorio vecino.
El ataque golpeó las granjas de Shebaa, una franja de terreno reclamada tanto por Líbano como por Siria, pero que sigue bajo control militar israelí desde 1967, según explicó el grupo terrorista en declaraciones recogidas por la cadena de televisión Al Manar, afín a Hezbollah.