Detrás de un reto entre niños y adolescentes para el que utilizan WhatsApp apareció una señal de alerta. La preocupación de los padres fue trasladada a los colegios en Córdoba, donde extendieron la advertencia para prevenir.

Una mamá contó en Telenoche que los menores son agregados en grupos con personas que no conocen y donde se comparte material violento y pornográfico.

María José explicó que ella lo descubrió a partir del aviso de la madre de un compañero de su hijo. “Le había llamado la atención porque lo habían sumado a un grupo”, comentó. “Ahí busqué el celular de mi hijo que estaba durmiendo y no accedió a esa información. Cuando vi el contenido del grupo lo eliminé, lo bloqueé y lo reporté porque el contenido era espantoso para cualquiera, pero para un niño de 11 años más”, sostuvo.

La mujer señaló que todo empieza con un desafío en el que lo chicos fijan como objetivo alcanzar determinada cantidad de integrantes. “Con este de tema de ‘lleguemos a 10 mil’ entonces les parece divertido y van sumando a sus contactos y son todos niños”, alertó.

Ante esa situación afirmó que activó el control parental y restringió los dispositivos tecnológicos del niño “para que cada vez que quiera acceder a algo me pregunte a mi celular si autorizo”.

Cómo prevenir

Andrés Piazza, abogado experto en ciberdelitos, recalcó que en WhatsApp se pueden establecer límites “para que alguien no sea agregado a un grupo de manera coercitiva por un tercero”.

El especialista mencionó en diálogo con Telenoche que este tipo de protección debe realizarse a través de ajustes de la aplicación y desde allí configurar la privacidad para restringir estas acciones. Preocupación por material violento y pornográfico en grupos de WhatsApp.

Sobre esta modalidad presente en Córdoba, Piazza sostuvo que “hay varios delitos involucrados” y a la vez aseguró que estos “grupos organizados” se encuentran cerca, en la misma jurisdicción.

Por otra parte destacó que los celulares van dejando mucha información y es posible identificar a los responsables mediante la cooperación de las empresas de tecnología a la Justicia. “Si hay una investigación cuidadosa va a ser muy difícil, tendrían que ser muy hábiles eliminando las pruebas. Por lo general a estos se los encuentran”, planteó.